Ha finalizado triunfalmente la temporada 2018-19 para Libellula Volley, el equipo de voleibol femenino patrocinado por Libellula: las ganadoras absolutas del Campeonato de la Serie C y de la Copa del Piamonte, segundas en la Copa de Alpi, donde compitió con equipos de Liguria, Lombardia y Triveneto.

Hemos pedido a Umberto Cammardella, CEO de Libellula y Presidente del Consorcio Libellula Volley, y a Alberto Milanesio, General Manager de Libellula y Vicepresidente del Consorcio, que nos comenten estos resultados tan excelentes.

“Por supuesto, se trata de una prestación increíble para una sociedad deportiva tan joven. Nacimos en 2017, pero el nuestro ha sido un crecimiento constante: en dos años hemos pasado de la serie D a la división nacional de la serie B – comenta Cammardella – Obviamente el mérito de esta actuación es, en primer lugar, de las chicas de nuestro equipo, que han demostrado en los entrenamientos y durante los partidos una extraordinaria determinación y abnegación. Como Libellula, creo que hemos contribuido aportando habilidades de gestión, organización, atención al talento, aspectos que son la base del éxito de Libellula como empresa”.     

¿De dónde surgió la idea de patrocinar un equipo deportivo local?

Libellula es una empresa de éxito,  que en treinta años de actividad se ha convertido en líder absoluto en Italia y en un actor importante a nivel internacional, conocida por todos los profesionales – subraya Milanesio – Hace dos años con Umberto decidimos que era estratégicamente importante adquirir visibilidad a nivel local: esto para aumentar nuestra notoriedad e imagen en el territorio, hecho importante para convertirse en una realidad atractiva para la contratación de personal pero también comercialmente con empresas locales, con vistas a una futura diversificación de nuestro negocio. El patrocinio deportivo nos pareció, por tanto, la herramienta ideal

 

¿Por qué se eligió el voleibol?

Obviamente, la elección no es casual: sabemos bien que el futbol tiene un mayor seguimiento y visibilidad en los medios de comunicación. Además de los aspectos comunicativos, también hemos tenido en cuenta los valores que sean coincidentes con los de Libellula – añade Cammardella – El voleibol es un deporte en el que el equipo, el espíritu de pertenencia, el sentido de la ética, la pasión y el deseo de alcanzar metas con determinación son fundamentales. Estoy hablando de voleibol, pero siento que estoy hablando de Libellula como empresa.   

En nuestra decisión también contó que el voleibol sigue siendo un deporte auténtico, limpio, en auge como practicantes y público, muy seguido a nivel local. Nuestro pabellón está siempre lleno de aficionados que nos animan durante los partidos internos.  

 

El proyecto Consorcio Libellula Volley

“Se trata de una estructura que nace en julio de 2017, con el objetivo de crear una verdadera cultura deportiva a nivel social, tanto buscando la excelencia en la enseñanza del voleibol y el espíritu deportivo, como renociendo un papel de responsabilidad y utilidad social a la comunidad local – aclara Milanesio – Como es natural, hemos puesto a disposición del Consorcio nuestro know-how organizativo: también a nivel no profesional, para obtener resultados de excelencia deportiva el entusiasmo por sí solo no es suficiente y la improvisación lleva directamente al fracaso. Como en los negocios”.

 

“A través del Consorcio Libellula Volley, yo y Alberto nos hemos propuesto de crear una estructura moderna, capaz de convertirse en un punto de referencia, también de soporte y respaldo para otras sociedades deportivas ya existentes y nuevas en la zona de Cuneo – añade Cammardella – Nuestro objetivo es de elevar los estándares de calidad y cantidad de la práctica del voleibol y de facilitar el logro de objetivos comunes y compartidos a través de un único proyecto educativo, deportivo y cultural, a la vez que se respeta la individualidad  de cada uno de los clubes deportivos del zona.

 

“La ventaja de estos proyectos es atraer a los técnicos y atletas más cualificados del movimiento, creando así las condiciones para lograr mejores resultados en el deporte – destaca Milanesio – El Consorcio ha firmado un acuerdo para la gestión del Palacio denominado LIBELLULA ARENA, una instalación que se ha convertido en uno de los recintos ideales para la práctica del voleibol, y mucho más.

Hoy Libellula Volley cuenta con 12 equipos, 220 atletas de 6 a 40 años, 15 entrenadores, 40 managers.

En resumen, yo y Umberto hemos trabajado mucho … (sonríe), pero los resultados están llegando. Trabajar bien siempre vale la pena”.

 

Libellula Volley en lo social

“El Consorcio no es necesariamente solo deporte – subraya Milanesio – El voleibol puede contribuir a la inclusión y a la integración social, favoreciendo los intercambios interculturales y convertirse en una herramienta de educación y formación.

 En los jóvenes, la educación deportiva proporciona experiencias individuales y colectivas que contribuyen al autodescubrimiento, al crecimiento personal y a la autoestima. El deporte puede abrir las mentes de los jóvenes permitiéndoles tener un enfoque adecuado de la propia sociedad y de las diferentes culturas, un tema que está de actualidad en estos días.

“En resumen, Libellula ha entrado desde hace poco en el mundo del deporte y del voleibol, pero tenemos intención de permanecer por mucho tiempo con un rol ganador – concluye Cammardella – haciendo que “pensar de forma innovadora y con anticipación” sea el sello distintivo de nuestra presencia, al igual que en el negocio principal de nuestra empresa”.